El estadounidense Noah Lyles se quedó con el rótulo de "el hombre más rápido del mundo" al ganar la célebre final olímpica de los 100 metros llanos, ante 80 mil espectadores en el Stade de France.
Con un tiempo de 9,79 segundos aventajó en solo cinco milésimas al jamaiquino Kishane Thompson, mientras que tercero fue el también yanqui Fred Kerley (9,81).
Crédito: Claro Sports.